Presentación del Libro
“La Luna - La Clave”
por K. Parvathi Kumar
Trabajar con los ciclos de la Luna Nueva y la Luna Llena es el paso fundamental para abrir las puertas de la iniciación. Esto permite entrar en los campos invisibles y divinos de la luz a través del mundo visible. De una forma u otra, los antiguos videntes se aseguraron de que los seres humanos se relacionaran con cada fase de la Luna. No es más que la preocupación de los videntes por la humanidad.
El libro "La Luna - La Clave" por el Dr. K. Parvathi Kumar da profundos conocimientos sobre el simbolismo de la Luna. Muchos más detalles relacionados con la Luna se pueden obtener de la tradición védica.
Fundación Dhanishta, Visakhapatnam, India, Mayo 2017
Hasta el momento este librito no se encuentra publicado en español, sólo en inglés. Nosotros damos no obstante un pequeño extracto.
Muestra:
Capítulo 2 (extracto)
El Sol es considerado como masculino, el ser, mientras que la Luna es considerada como femenina, la mente del ser. El brillo esencial de la Luna es sólo la luz reflejada del Sol. Mientras el Sol apoya la Luna, la Luna apoya la Tierra. Con esto, entendemos que la mente, apoyándose en el ser, apoya al cuerpo. Ésta nutre el cuerpo y proporciona un hogar para el ser. El cuerpo no es sino la residencia del yo. La residencia es organizada para el ser por la mente. El tema de la astrología esotérica (donde los principios astrológicos están correlacionados con el hombre y se elaboran para la alineación apropiada), gira alrededor de los tres centros esenciales, el Sol (el ser), la Luna (la mente) y la Tierra (el cuerpo). La comprensión de estos tres centros en nosotros es de gran importancia para un estudiante esotérico. Para un discípulo del plano búdico, estos tres centros son de gran importancia. Representan los principios solar, lunar y terrestre en nosotros. Estos principios son comunes a nosotros y a los planetas. Un planeta es el resultado de un principio. El principio es la causa, ya sea planetaria o humana. El estudio del Sol, la Luna y la Tierra como globos planetarios es la astrología exotérica. Estudiarlos en relación con el ser, la mente y el cuerpo es el enfoque esotérico. Los planetas son grandes seres con grandes cuerpos desarrollados con los mismos principios. Estos principios existen en la vida de todos los seres incluyendo la vida atómica.
Nuestra mente recibe pensamientos desde el alma y los refleja en el mundo de la materia. Nuestra mente juega el papel de la Luna, que no es más que un principio reflejante. La capacidad de reflejar lo más elevado en lo más bajo y la capacidad de transformar lo inferior en lo más alto es el trabajo de la mente, ya sea la mente cósmica, solar, planetaria o individual. Cuando la mente se vuelve hacia adentro, el mundo objetivo no existe; Abre el mundo subjetivo. Cuando la mente se vuelve hacia fuera, hace visible el mundo objetivo. Cuando la mente está en su total objetividad, se llama Luna Llena. Cuando es totalmente subjetiva, se llama Luna Nueva o No Luna. Los videntes dicen que la luz subjetiva es Luna Nueva mientras que la luz objetiva es Luna Llena.
El discipulado o la práctica del ocultismo ayuda a desarrollar la luz subjetiva o la mente subjetiva simultáneamente con la luz objetiva y la mente objetiva. La Luna así ayuda a girar a la subjetividad o a la objetividad y se coloca como una entrada entre el hombre interno y el hombre externo. Dentro de cada uno de nosotros, está la mente objetiva externa; Existe también la mente subjetiva interna, y su fuente es el hombre espiritual interno. Tal es la comprensión de la implemento de la Masonería, la brújula.
El lado izquierdo de la brújula representa la objetividad. El lado derecha de la brújula representa la subjetividad, mientras que la cabeza de la brújula representa la fuente de los dos, el alma. El hombre es, pues, triple. La Luna ayuda a experimentar este principio triple a través de la capacidad de reflejar hacia dentro y hacia afuera. La mente (la Luna) es así un principio vital para experimentar la objetividad y la subjetividad por el ser.
Es interesante notar que mientras la Luna gira alrededor de la Tierra en el cielo, una parte de ella está orientada a la Tierra mientras que la otra parte está expuesta al Sol. Así también, un discípulo se recomienda orientarse tanto hacia el alma como se orienta hacia cuerpo. Se espera que él se oriente hacia el Maestro (alma) en él tanto como se orienta a la materia en él. El Maestro-Mente-Materia y la Materia-Mente-Maestro son los temas de la creación, que el discípulo realiza a través de su consistente y constante orientación a la materia por un lado y al Maestro por el otro lado, con la ayuda de la capacidad reflexiva del mente.