Presentación del Libro
“Rudra”
por K. Parvathi Kumar
En el esquema de la sabiduría Védica y de su Puranas relacionados, Rudra es Él Señor
de la voluntad, Él Señor del fuego, que abre la manera para que la creación suceda en
los diferentes niveles. Él es también Él Señor que despeja
impedimientos a la Creación. También lo ven como Él Señor que ayuda a recorrer el cámino
de vuelta. Así como para la entrada en el mundo como para la salida de el, Rudra sigue siendo el
Principal Ayudante, Gurú, Profesor, Yogi.
Contenido: Parte I: Rudra.El Señor
de la Voluntad y la Vibración Cósmicas; El Advenimiento de Rudra (Primer Logos); Algunas
dimensiones sobre Rudra; Part II: Rudra Abhishekam (Ritual del Agua); Reglamento y Tiempo; Ritual del Agua;
Breve explicación relacionada con los mantrams de los 7 pasos.
Nueva edición
multilingüe 2006: Inglés/alemán/español: € 18
Dhanishta –
The World Teacher Trust – Global, Büelstrasse 17, CH-6052 Hergiswil Suiza / Ediciones Dhanishtha,
Barcelona, España. ISBN: 978-3-9523145-1-7
Muestra:
El Advenimiento de Rudra (Primer Logos)
En el principio de la Creación (lo cual es una doctrina en sí misma) emergió el tercer Logos (Brahma, el Creador). Fue iniciado como Creador por el Dios Absoluto. Cuando pensó en la Creación, cuatro Kumaras surgieron de Él. El Creador les recomendó que cooperaran con él para crear. Los Kumaras sonrieron y permanecieron silenciosos. El propósito del surgir de los Kumaras era diferente a lo que el Creador había visualizado. Estos Kumaras son los hijos de la Voluntad y del Yoga. Madame Blavatsky desarrolló mucho este tema en La Doctrina Secreta. Madame Alice A. Bailey también los describe en el Tratado sobre Fuego Cósmico. En Los Vedas, se los conoce también como Agni Shvathas. La belleza y el esplendor de los Kumaras es también una doctrina en sí misma. Son los seres más sublimes que constituyen la Jerarquía del Yoga. Forman las cuatro avenidas en la Creación para el descenso del Señor, cada vez que Su voluntad es descender. Su propósito no era trabajar para el plan del Creador, sino para el Señor mismo. El tercer Logos se molestó ante la desobediencia de los Kumaras.
Cuando el tercer Logos se molestó debido a la desobediencia de los Kumaras, trató de contener su ira. Sin embargo, el fuego de la ira abrió un centro en su frente y Rudra, el primer Logos, surgió de allí. Cuando salió era azul y rojo a la vez. Por lo tanto, se le llamó NILA LOHITHA. La cualidad de Rudra era azul y el poder que lo envolvía, rojo. El poder del rojo abrió camino a la Creación y la bienaventuranza del azul se difundió por toda la Creación. Ésa es la belleza del surgimiento de Rudra.
Rudra es el primero de los devas, las entidades tangibles que surgen de lo intangible y de Dios Absoluto. Es el Señor que brota como Fuego Cósmico, como primer estímulo, y guía a los devas hacia la manifestación. Penetra los tres éteres más allá de los cinco elementos y hace aparecer todo el Universo de la aparente Nada. Y Él mismo es quien nuevamente retira toda la Creación hacia la Nada. Él es el pasaje que va del cero negativo al cero positivo y otra vez del cero positivo al cero negativo.
Emerge como un bramido y, por lo tanto, en los Vedas, se le llama Rudra. Los Vedas clasifican a los devas en tres categorías principales:
a. Los Adityas: Son las 12 cualidades de los 12 signos solares. Son los señores de la radiación. Se expresan a través de los rayos de la esfera solar durante los 12 meses del año. La causa de su expresión es Rudra.
b. Los Rudras: Son los devas de la vibración que transmiten fuerza a través de los éteres. Esta transmisión es a través del sonido y la luz.
c. Los Vasus: Son los devas de la materialización.
Los Adityas son 12, los Rudras son 11 y los Vasus, 8. En total son 31, y con los principios de izquierda y derecha son 33. Así, 33 son los devas que funcionan en los 7 planos en total y, de ahí surge el número 330.000,000. Los Vedas se refieren a ellos como 33 crores de devas.
Once es el número de los Rudras y es el número del Maestro, que tres veces es 33, y dan a luz a la Creación, formando triángulos con los devas de la radiación y la materialización.